• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
Sercatolico

Sercatolico

MENUMENU
  • Actualidad
  • Devocionario
    • Sagrada Eucaristía
    • Devoción a la Santísima Trinidad
    • Devoción a Dios Padre
    • Devoción a Nuestro Señor Jesucristo
    • Devoción al Espíritu Santo
    • Devoción a la Virgen María
    • Devoción a San José
    • Devociones varias
    • Devociones para estos tiempos de tribulación
  • Nuestra Fe
    • Biblia
      • Vaticana
    • Vida de Jesús
    • Catecismo católico 1997
    • Código de derecho canónico
    • Lecturas varias
Portada » Capitulo 19

Capitulo 19

30 de enero de 2014 by tobiaswolf

Capítulo 19

 

1 Más vale un pobre que camina con integridad que un hombre insensato y de labios tortuosos.

 

2 Sin la ciencia, ni el mismo celo es bueno, y el que se precipita malogra su intento.

 

3 La necedad del hombre pervierte su camino, y luego su corazón se irrita contra el Señor.

 

4 La fortuna multiplica los amigos, pero el pobre se ve separado hasta de su amigo.

 

5 El testigo falso no quedará impune y el que profiere mentiras no escapará.

 

6 Son muchos los que adulan al noble y todos son amigos del que hace regalos.

 

7 Al pobre hasta sus hermanos lo aborrecen, ¡cuánto más se alejarán de él sus amigos!

 

8 El que adquiere buen juicio se ama a sí mismo, al que es razonable le irá bien.

 

9 El testigo falso no quedará impune y el que profiere mentiras perecerá.

 

10 No te sienta bien al insensato una vida confortable, ¡cuánto menos a un esclavo gobernar a los príncipes!

 

11 El buen juicio de un hombre aplaca su ira, y su gloria es pasar por alto una ofensa.

 

12 Como rugido de león es la furia del rey, y su favor, como rocío sobre la hierba.

 

13 Un hijo insensato es una calamidad para su padre, y las rencillas de una mujer son una gotera incesante.

 

14 Casa y fortuna son herencia de los padres, pero una mujer prudente es un don del Señor.

 

15 La pereza hace caer en el letargo, y la persona indolente pasará hambre.

 

16 El que guarda los preceptos se guarda a sí mismo, el que descuida su propia conducta morirá.

 

17 El que se apiada del pobre presta al Señor, y él le devolverá el bien que hizo.

 

18 Corrige a tu hijo mientras haya esperanza, pero no te arrebates hasta hacerlo morir.

 

19 El hombre irascible se expone a las multas, si tratas de ayudarlo, empeoras las cosas.

 

20 Escucha el consejo y acepta la corrección, y al fin llegarás a ser sabio.

 

21 Hay muchos proyectos en el corazón del hombre, pero sólo se realiza el designio del Señor.

 

22 Lo que se espera de un hombre es la fidelidad y más vale ser pobre que mentiroso.

 

23 El temor del Señor lleva a la vida, el que se sacia de él pasa la noche sin ser visitado por el mal.

 

24 El perezoso hunde su mano en el plato y ni siquiera es capaz de llevársela a la boca.

 

25 Golpea al insolente, y el simple se hará precavido, reprende al inteligente, y sabrá entender.

 

26 El que maltrata a su padre y echa a su madre es un hijo que causa vergüenza y deshonor.

 

27 Si dejas, hijo mío, de escuchar la instrucción, te extraviarás lejos de las palabras de la sabiduría.

 

28 El testigo infame se burla del derecho, y la boca de los malvados devora la iniquidad.

 

29 Hay castigos establecidos para los insolentes y golpes, para las espaldas de los necios.

Publicado en: Proverbios

© Copyright - Ser Catolico a - Información Legal - Política de Privacidad - Mapa Web