• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
Sercatolico

Sercatolico

MENUMENU
  • Actualidad
  • Devocionario
    • Sagrada Eucaristía
    • Devoción a la Santísima Trinidad
    • Devoción a Dios Padre
    • Devoción a Nuestro Señor Jesucristo
    • Devoción al Espíritu Santo
    • Devoción a la Virgen María
    • Devoción a San José
    • Devociones varias
    • Devociones para estos tiempos de tribulación
  • Nuestra Fe
    • Biblia
      • Vaticana
    • Vida de Jesús
    • Catecismo católico 1997
    • Código de derecho canónico
    • Lecturas varias
Portada » Capitulo 15

Capitulo 15

31 de enero de 2014 by tobiaswolf

Capítulo 15

 

1 El que teme al Señor hace todo esto y el que se aferra a la Ley logrará la sabiduría.

 

2 Ella le saldrá al encuentro como una madre y lo recibirá como una joven esposa,

 

3 lo alimentará con el pan de la inteligencia y le hará beber el agua de la sabiduría.

 

4 El se apoyará en ella, y no vacilará, se unirá a ella, y no quedará confundido.

 

5 Ella lo exaltará por encima de sus compañeros y le abrirá la boca en medio de la asamblea.

 

6 El encontrará el gozo y la corona de la alegría y recibirá en herencia un nombre perdurable.

 

7 Nunca la poseerán los que carecen de inteligencia, ni los hombres pecadores la verán jamás.

 

8 Ella se mantiene alejada del orgullo, y los mentirosos no piensan en ella.

 

9 No cabe la alabanza en labios del pecador, porque el Señor no se la envía:

 

10 sin sabiduría no hay alabanza, y es el Señor el que la inspira.

 

11 No digas: «Fue el Señor el que me hizo claudicar», porque él no hace nunca lo que detesta.

 

12 No digas: «El me hizo extraviar», porque él no necesita de un hombre pecador.

 

13 El Señor detesta toda abominación, y nada abominable es amado por los que lo temen.

 

14 El hizo al hombre en el principio y lo dejó librado a su propio albedrío.

 

15 Si quieres, puedes observar los mandamientos y cumplir fielmente lo que le agrada.

 

16 El puso ante ti el fuego y el agua: hacia lo que quieras, extenderás tu mano.

 

17 Ante los hombres están la vida y la muerte: a cada uno se le dará lo que prefiera.

 

18 Porque grande es la sabiduría del Señor, él es fuerte y poderoso, y ve todas las cosas.

 

19 Sus ojos están fijos en aquellos que lo temen y él conoce todas las obras del hombre.

 

20 A nadie le ordenó ser impío ni dio a nadie autorización para pecar.

Archivado en: Eclesiastico

© Copyright - Ser Catolico a - Información Legal - Política de Privacidad - Mapa Web